Desde que era pequeña, Ishihara ha tenido una "cosa" por las piernas de las mujeres. De hecho, se convirtió en vicepresidenta del consejo estudiantil solo para poder pasar más tiempo admirando los miembros bien formados y besables del presidente Kurosaki. Pero cuando el adorador y el adorado están encerrados en una habitación, un malentendido deja paso a un deseo indescriptible...